El ministro de Economía, Planificación y Desarrollo (MEPyD), Pavel Isa Contreras, afirmó ayer que el desafío ahora no es la macroeconomía, sino transformar ese crecimiento en calidad de vida, creando más empleos y proporcionando más y mejores servicios públicos.

“El esfuerzo que estamos haciendo es en esa dirección, trabajando con todo el sector público empujando políticas públicas a tales fines”, precisó.

Durante su participación en el Almuerzo Semanal del Grupo de Comunicaciones Corripio, el funcionario valoró la estabilidad económica del país. Para el 2023 se prevé un crecimiento económico de 4.5%, que pese a ser menor al del año actual, que ronda en un 5.3%, es “muy bueno”, tomando en consideración el contexto internacional.

Asimismo, dijo que la inflación será mucho menor. “Uno de los problemas que hemos tenido en este proceso de recuperación significativa es que parte de los beneficios de la recuperación han sido erosionados por la inflación. Es decir, los salarios subieron, la cantidad de personas que tienen trabajo subió mucho y por tanto los ingresos en los hogares aumentaron, pero, parte de esos ingresos fueron erosionados. Eso no va a pasar el año que viene”, explicó.

El ministro citó entre los factores que incidieron en la recuperación de la economía la diversificación, entre ellos, los sectores de la construcción, turismo, comercio, industria nacional y transporte. Además, ponderó la inversión pública y privada.

Explicó que debido a la postergación temporal del plan de desmonte del subsidio eléctrico, los subsidios a los combustibles y la implementación de políticas monetarias, se prevé que la inflación doméstica cierre el presente año en 7.2 %.

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De acuerdo a lo explicado, el Gobierno ha destinado a subsidios el 0.9 por ciento del PIB, es decir 60 mil millones de pesos.

Pese al crecimiento, hay un ambiente de restricción importante de recursos.

“El pastel fiscal tiene un tamaño insuficiente para atender todos los desafíos a que está obligado el Estado para ofrecer mejores servicios públicos; un 15 % de presión tributaria, un 4 % para educación, transferencia de recursos al Banco Central, subsidio a la energía eléctrica y pago del equivalente al 3 % del PIB en intereses de la deuda pública. Entonces, lo que queda realmente no es mucho, por eso es que la planificación es importante”, precisó.

El ministro participó en el encuentro acompañado de Domingo Matías, viceministro de Ordenamiento Territorial y Desarrollo Regional; Luis Madera, viceministro de Planificación e Inversión Pública; Alexis Cruz, viceministro de Análisis Económico y Social; Manuel Robles, director de Despacho; Sandra Lara, directora de Cooperación Multilateral y Elvira Lora, directora de Comunicaciones. Fueron recibidos por Manuel y José Alfredo Corripio.

Enfoque

De acuerdo a lo explicado, en el Ministerio de Economía están enfocados en aplicar políticas públicas que permitan prosperidad, reducir desigualdad social y alcanzar una mayor cohesión social, y mayor sostenibilidad ambiental. “Aunque la economía ha venido creciendo, lo ha hecho con una importante dosis de exclusión”, agregó el ministro.