Filosóficamente la escatología entraña el estudio de las teorías del destino final de todo cuanto existe. Teológicamente, trata sobre la doctrina de las postrimerías del hombre: el fin del mundo, el cielo y el infierno. Los mitos escatológicos son relatos que tratan sobre el fin de los tiempos, el destino último del mundo y la humanidad, así como de los eventos que ocurren al final de la existencia tal como la conocemos. Estos mitos se encuentran en diversas culturas y religiones alrededor del mundo y abordan temas como la destrucción, el juicio final, la renovación y el renacimiento. Proveen un marco para entender todos estos conceptos, lesiones morales y éticas. A menudo contienen enseñanzas sobre cómo vivir de manera justa y virtuosa, subrayando la recompensa o el castigo que sigue a nuestras acciones; estos mitos unen comunidades en torno a creencias compartidas sobre el futuro y el destino último; invitan a la reflexión sobre la naturaleza de la existencia, el alma y el propósito de la vida. Los mitos escatológicos, por tanto, no solo ofrecen visiones sobre el fin de los tiempos, sino que también reflejan las esperanzas, temores y creencias profundas de las culturas que los crearon.

El cristianismo en el Apocalipsis de Juan describe visiones del juicio final en el que los justos reciben la vida eterna, mientras que los malvados son condenados. En la mitología nórdica, el Ragnarök marca el fin del mundo en una serie de eventos catastróficos; tras la destrucción, el mundo renace y se repuebla. El hinduismo habla del Kali Yuga, la última y más oscura de las cuatro eras en el ciclo cósmico hindú caracterizado por una decadencia moral y social. Al final de Kali Yuga, se restaurará el dharma (orden y justicia) y dará inicio a una nueva era de prosperidad y rectitud. La mitología maya habla del Ciclo de la Cuenta Larga, para los mayas representaba el fin de un ciclo y el comienzo de otro. La noción de renovación es central, más que la destrucción definitiva. El islam habla del día del juicio (Yawm al-Qiyamah), momento en que Alá juzgará a cada individuo según sus obras. Los justos son recompensados con el paraíso (Jannah), mientras que los malvados son condenados al infierno (Jahannam). En el zoroastrismo, Frashokereti es la renovación final del mundo, donde el bien triunfa sobre el mal. Se cree que Saoshyant, un salvador final, llevará a cabo la resurrección de los muertos y la purificación de todas las almas. El mundo será renovado en un estado de perfección eterna.

Asimismo, la mitología griega cuenta con el mito de Er, narrado por Platón, describe la experiencia de un soldado que revive tras estar muerto y cuenta lo que vio en el más allá. El mito aborda temas de justicia, reencarnación y la elección de futuras vidas. Las almas son juzgadas y eligen su próximo destino, subrayando la importancia de la sabiduría y la virtud. La mitología azteca habla del Sol y la destrucción de los mundos, creían en cinco soles sucesivos, cada uno representando una era diferente del mundo. Cada sol fue destruido por diferentes catástrofes (como inundaciones, terremotos, fuego). Actualmente estamos en la era del quinto sol, que también se espera que termine eventualmente. La mitología egipcia nos habla de Duat y la resurrección: el alma pasa por la Duat, el inframundo, donde es juzgada por Osiris. Si el alma es justa, se une al sol en su recorrido diario, simbolizando la eternidad y el renacimiento.

¿Para qué nos sirven este tipo de lectura y de conocimientos en esa época de la Cuarta Revolución Industrial? En el siglo XXI, los mitos escatológicos continúan siendo relevantes, aunque su interpretación y significado han evolucionado para adaptarse a los contextos contemporáneos. Y es que ellos nos permiten reflexionar sobre el sentido de la vida y el destino final de la humanidad. En una época marcada por rápidos cambios tecnológicos y sociales ofrecen una narrativa para contemplar el futuro de la humanidad y nuestro papel en él. A medida que la sociedad se enfrenta a desafíos globales como el cambio climático, las pandemias y la inestabilidad política, los mitos sobre el fin del mundo proporcionan un marco para entender y procesar la posibilidad de grandes transiciones o finales. Hoy, estos mitos ejercen un impacto en la cultura popular y en los medios de entretenimiento, a través de películas, series de televisión, libros y videojuegos que exploran temas apocalípticos o post-apocalípticos. Historias como «The Walking Dead», «Mad Max» o «The Road» que reflejan y exploran preocupaciones contemporáneas sobre el colapso social y la supervivencia. La mitología moderna a menudo toma elementos de mitos antiguos y los adaptan a contextos contemporáneos, lo que permite a las personas conectar con estos temas de manera relevante para sus vidas actuales.

De hecho, vemos serias influencias en la política y la sociedad e incluso en algunos movimientos religiosos y sectas que utilizan este tipo de mitos para justificar sus creencias y acciones. Incluso, la retórica política sobre «el fin de los tiempos» o crisis inminentes se utilizan para movilizar a las personas, justificar políticas radicales o resaltar la urgencia de ciertos problemas (como el cambio climático y la proliferación nuclear). Estos mitos invitan a las personas a reflexionar sobre sus valores y comportamientos, promoviendo una vida más ética y orientada al bien común. La noción de un mundo que puede ser destruido nos impulsa a buscar formas de coexistencia pacífica y armoniosa con nuestro entorno. En un mundo cada vez más secular, estos mitos también encuentran resonancia en movimientos de búsqueda espiritual que trascienden las religiones tradicionales, explorando la idea de un despertar o transformación personal y colectiva. Los mitos sobre el fin de los tiempos pueden ayudar a las personas a manejar la ansiedad y el miedo sobre el futuro, proporcionando una narrativa que da sentido a la incertidumbre. No solo tratan sobre la destrucción, sino también sobre la renovación y el renacimiento. Y al mismo tiempo, ofrecen esperanza y una visión de posibilidad de un futuro mejor después de la adversidad.

Estos mitos escatológicos, tienen una relevancia contemporánea que podemos ver cuando se habla sobre el cambio climático en términos apocalípticos, destacando escenarios de desastres naturales, extinción masiva y colapso de la civilización. Las discusiones sobre el futuro de la Inteligencia Artificial a menudo incluyen elementos escatológicos, como la posibilidad de que las máquinas superinteligentes puedan llevar a la extinción humana. Y quizás lo más notorio en estos últimos tiempos sea el debate sobre el transhumanismo, es decir, la fusión del ser humano con la tecnología y la trascendencia de los límites biológicos. En el siglo XXI, los mitos escatológicos siguen desempeñando un papel crucial en cómo entendemos y enfrentamos el futuro. Nos ayudan a explorar cuestiones existenciales, a motivar cambios positivos y a encontrar sentido en tiempos de crisis, a enfrentar la incertidumbre. Hoy, aunque las formas y los contextos pueden haber cambiado, el poder de estos mitos para inspirar, enseñar y conectar a la humanidad permanece tan fuerte como siempre.