Ubaldo Guzmán Molina 
La ejecución de los subsidios sociales fue de un 31% en primer trimestre de este año.
El economista Miguel Collado Di Franco, del CREES, dice que en el primer trimestre se gastó el 24% de lo presupuestado
En el primer trimestre de este año no hubo control del gasto y así continuará durante el resto del 2023, afirmó ayer el vicepresidente ejecutivo del Centro Regional de Estrategias Económicas Sostenibles (CREES), Miguel Collado Di Franco.
Al ser entrevistado vía telefónica, el economista explicó que esa situación genera que el déficit fiscal tenga que ser financiado con endeudamiento público.
Expresó que en el primer trimestre se gastó el 24% de lo presupuestado, pero que en el caso de los subsidios sociales se ejecutó el 31 por ciento.
Recordó que las autoridades del Gobierno, a través del ministro de Hacienda, Jochi Vicente, señalaron que tuvieron que hacer mayores transferencias a las distribuidoras eléctricas, lo que implica un crecimiento de los gastos corrientes.
Consideró positiva la decisión del Gobierno de avanzar el pago de la totalidad de las transferencias corrientes por concepto de recapitalización del Banco Central que estaban presupuestadas para 2023.
Reiteró que existe el temor de que haya un desbordamiento de los gastos del Gobierno por ser el 2023 un año preelectoral, lo cual es una costumbre en el ciclo político.
Sostuvo que el gasto de las empresas distribuidoras de electricidad (EDE) es muy alto en términos relativos en los últimos dos años.
Las pérdidas de las EDE han aumentado en el actual Gobierno, señaló.
Explicó que el incremento de los combustibles sube los costos de generación, traduciéndose en pérdidas para las EDE.
