En ocasiones nos vemos en las necesidad de tomar un préstamos, ya sea por alguna emergencia, completar el dinero que falta para algún proyecto o simplemente empezar a hacer un historial crediticio.
Independiente me, de cuál sea su motivo, a continuación una guía de los varios puntos que debe tomar en cuenta, según ProUsuario:
¿Es necesario?
Lo primero es que debes considerar si es necesario tomar un préstamo para adquirir eso que tanto deseas. Quizás si ahorras de manera programada puedes alcanzar esta meta en un mediano plazo, y de esta forma no tendrás que asumir el pago de intereses que conlleva el préstamo.
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Por ejemplo, si el monto que tomarás prestado es para adquirir algún electrodoméstico que no representa una urgencia puede ser buena idea abrir una cuenta de ahorros programando depósitos para así reunir el monto que necesitas. Esto implicaría esperar un poco más para llegar a esa meta, pero con la ventaja de que no tendrás que pagar interés.
Examina tu realidad financiera
Antes de decidir adquirir un financiamiento debes examinar tu presupuesto personal y tu realidad financiera. ¿Cuál sería la cuota? ¿Cuáles serían las demás condiciones? ¿Tendrás que hacer sacrificios? ¿Estás dispuesto/a hacerlos? ¿Se compromete el cumplimiento de algún compromiso anterior al asumir este nuevo? ¿Podrás cumplir todas tus responsabilidades financieras sin estar preocupado?
Evita el financiamiento total
En caso de que optes por un préstamo, es una buena práctica evitar financiamiento del monto total, sin importar el tipo de préstamo.
Lo ideal es que ahorres una parte del total de lo que vayas a adquirir para que te sirva de monto inicial y así reduzcas el peso de tu deuda.
Revisa tu historial crediticio
El cuarto punto es verificar si tienes un buen historial crediticio, si es que ya estás creando uno. Investiga un poco más en este artículo sobre el historial y score crediticio.
Ahorra dinero para varias cuotas
Quizás te preocupa un poco la posibilidad de no poder cumplir en algún momento con el pago de la cuota, así que para evitar esto lo ideal será ahorrar, como parte de tu fondo de emergencia, por lo menos el equivalente a tres meses de cuotas. Así tendrás la tranquilidad de que, si en algún momento se te presenta algún imprevisto, podrás cumplir tu responsabilidad ante la entidad financiera.
Infórmate
Tienes el deber de conocer y comprender qué es un préstamo, cómo puede impactar tu vida al momento de asumir ese compromiso. Infórmate, investiga hasta sentirte seguro de que conoces todos los detalles.
También es importante que entiendas bien cómo funcionan los intereses, las comisiones y demás cargos que puede tener este producto financiero.
Busca un experto
Si luego de haber investigado todo lo relacionado con el préstamo te queda alguna duda, lo mejor es que te acerques a personas de tu confianza o algún experto que conozcas, y les preguntes sobre sus experiencias con los préstamos o exactamente sobre tu inquietud.