El psiquiatra y terapeuta sexual Rafael García Álvarez alertó a los padres sobre los riesgos a que están expuestos los niños y adolescentes con la publicación, en redes sociales, de imágenes sexualmente explícitas que atentan contra su integridad emocional y los podrían convertir en víctimas de depredadores sexuales.
El profesional de la conducta hizo la advertencia al señalar los peligros que hay detrás de las tecnologías de la comunicación, pues si bien son un importante recurso, hacia esas plataformas migran personas que pueden hacer mucho daño a los referidos segmentos de la población.
García Álvarez, quien es fundador del Instituto de Sexualidad Humana de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), refirió que la exposición en las redes sociales puede ser muy importante para algunas áreas profesionales y del entretenimiento, pero muy riesgosas para niños y adolescentes.
En ese sentido destacó que a esos peligros se suma una debilidad de los padres, por desconocer cómo funcionan las tecnologías de la comunicación y todo lo pernicioso que puede haber detrás.
“Los padres no tienen ningún control porque los jóvenes tienen un manejo de la tecnología que ellos no los alcanzan, están perdidos”, expresó.
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Los peligros del sexting
El doctor García Álvarez explicó que en el contexto de la sexualidad y las redes sociales a los terapeutas también les preocupa un fenómeno conocido como “sexting”, que no es más que las fotos o vídeos eróticos que los adolescentes se hacen y las comparten con amigos.
“Es preocupación para muchos padres el sexting, que es que adolescentes se mandan fotos íntimas y después uno de ellos decide subirlas a las redes, y como son menores no hay implicaciones legales, pero si es un adulto que las sube entonces es tráfico de pornografía infantil y eso es un delito.
“Todos los casos que tenemos de sexting no llegan a la justicia porque hay padres que no ponen denuncias, pero no estamos de acuerdo con que esos casos se manejen judicialmente porque de todas maneras se expone más al adolescente, entonces es mejor manejar las cosas de otra forma”.
De acuerdo con el experto, lo que lleva a muchos adolescentes a compartir con otros esas imágenes de contenido sexual es el deseo de romper con las reglas, un patrón de conducta que puede ser notorio en esa etapa.
Los riesgos de la Incitación al erotismo a destiempo
Otro fenómeno social que despierta preocupación en los profesionales de la conducta es la incitación a una sexualidad temprana, y peor aún, cuando sean los padres los responsables.
García Álvarez cuestionó que adultos suban a redes sociales vídeos de menores de edad, incluso de niñas de menos de 10 años, exhibiendo sus destrezas en bailes eróticos que se convierten en una iniciación prematura a la sexualidad, convirtiéndoles luego en presa fácil de depredadores.
“Están poniendo esas niñas a exponer una especie de erotismo, y al pedófilo le va a atraer mucho ese tipo de situaciones, y están desinhibiendo a esa niña desde temprano, y después eso va a escalar esas conductas, haciéndose peligrosas porque tienen el permiso de los padres para hacer cosas porque ellos mismos les celebran esos bailes.
“Obviamente eso nos preocupa, porque se está poniendo al niño o a la niña en una etapa demasiado avanzada, y esos padres no van a estar ahí para protegerlos. Las niñas que demuestran destrezas sexuales eso quiere decir que alguien las está induciendo, entonces eso es algo que nos preocupa. Si los niños presentan destrezas sexuales inmediatamente pensamos que hubo un abuso, y que alguien los entrena o los adoctrina”.