El destacamento «de lujo» del Ensanche La Fe, en el que «no hay ni dónde orinar»

«Pasaron los ocho años de Leonel Fernández, pasaron los ocho años de Danilo Medina, y ya Luis Abinader va por cinco; anunciando (de) todo, los jefes de la Policía, todos los ministros, incluyendo a Faride Raful, que van a hacer cientos de destacamentos en el país, ¿y el Ensanche La Fe, no merece un destacamento?».

La queja, a modo de pregunta, la hace el presidente de la Junta de Vecinos Los Amigos de la Nueva Fe, Ramón Cruz, quien externó al periódico Hoy las condiciones en las que opera lo que se considera un cuartel policial, donde invitó a reporteros de «Hoy en tu Barrio» para constatar que en el lugar «no existe un espacio ni dónde orinar».

A juicio de Cruz, el presidente Abinader «debe empoderarse» y no permitir que la estación de la Policía Nacional en ese reconocido sector del Distrito Nacional esté limitada a un furgón, ubicado encima de una acera en la calle Tunti Cáceres, frente al parque La Javilla.

Defendió que el sector es una de las localidades de la capital cuyos residentes tienen «la mayor tolerancia en convivencia; que menos problemas le causa al Estado».

En ese sentido, exigió al Gobierno un espacio que dignifique no solo a los agentes de la institución encargada de velar por el orden y la seguridad, sino también a favor de los más de 22 mil habitantes de ese ensanche.

«Nosotros tenemos que ir a buscar justicia a Cristo Rey, que no es un sector representativo delante de nosotros, que tenemos mejor comportamiento, menos incidencia delincuencial», indicó.

«Porque aquí hay más de 15 iglesias, hay instituciones sociales, como las juntas de vecinos, que vivimos trabajando 24 horas a favor de la comunidad. Señor presidente, ¡resuelva eso!», exclamó Cruz.

El presidente de la junta de vecinos contó además que, desde el primer gobierno de Fernández, las autoridades—tanto policiales como gubernamentales de entonces—se negaron a construir la estación, alegando la falta de un terreno para ejecutar la obra, una excusa que ya tiene una vigencia de más de 20 años, aseveró dicho representante.

Del mismo modo, residentes consultados por el periódico Hoy coincidieron con Cruz, al alegar que, pese a que los niveles de delincuencia y raterismo no son alarmantes como en otros sectores del Distrito Nacional, es necesario la construcción de un destacamento policial.

Reforma policial y más destacamentos

Esas exigencias vuelven a emerger en momentos en los que el Gobierno, a través del Ministerio de Interior y Policía, desarrolla una reforma policial, un nuevo modelo de patrullaje y servicio de los agentes.

Según los más recientes informes, la reestructuración de la Policía tiene tres áreas: educativa, policial y operativa.

En septiembre del año 2023, Abinader dijo que se habían colocado 4,200 millones de pesos para el proceso de la reforma, aparte del presupuesto para dicho proyecto, que había sido aumentado, aunque no precisó a cuánto.

En julio del año 2024, cuando en ese entonces era ministro de Interior y Policía, Jesús «Chu» Vásquez, el Gobierno anunció la licitación de 106 destacamentos policiales, de los cuales, según una nota oficial, una parte serían construidos y otros remozados.

Durante una inauguración de un destacamento nuevo en febrero de 2025 en el municipio Ovideo, en Pedernales, el presidente de la Comisión Presidencial de Desarrollo Provincial, Ángel De la Cruz, acompañado del comisionado ejecutivo para la reforma policial, Luis Ernesto García Hernández, informó que el Gobierno había inaugurado hasta esa fecha 51 destacamentos del nuevo modelo, de los cuales 36 fueron entregados durante el año 2024.

Puntualizó que había 29 dotaciones policiales en distintas fases de construcción, por lo que, una vez concluidas estas obras, el total de destacamentos entregados ascenderá a 80. Agregó que, posteriormente, se llevaría a cabo un proceso de licitación para la construcción de otros 64 destacamentos y las sedes regionales de la Policía Nacional.

«Desastre» en las aceras del Ensanche La Fe

Otra de las problemáticas por las que se quejan los residentes del citado sector es por la falta de espacios públicos, principalmente en las aceras. Juan Abreu Núñez, un señor que lleva más de cuatro décadas viviendo en La Fe, se quejó por la travesía que significa transitar allí como peatón—y en vehículos—, especialmente por la ocupación indiscriminada que han hecho dueños de pequeños comercios.

«Mayormente, los talleres de desabolladura y pintura son los que ocupan las aceras. Es un puro desastre. Las aceras las tienen todas explotadas por donde quiera. En la calle Mauricio Báez, entre la 35 y la Juan Alejandro Ibarra, ahí hay un hoyo grande en la acera, pero grande, y por donde quiera que te mueves es un desastre; tú tienes que bajar a la calle, porque no puedes pasar por la acera», lamentó Abreu.

Recordó cómo el Ensanche La Fe, «por la inacción de los gobiernos» se ha cambiado, desde los años 80 a la fecha. «Esto era tranquilo, limpio. No se veía delincuencia. Tú podías dormir hasta en la calle, era muy diferente y no veías las aceras con este desorden», dijo.