Panificadora Moderna, que fabrica los productos Dolly’s, llegó el 14 de este mes a su cuarenta aniversario con importantes logros que la posicionan como una empresa modelo en la elaboración de pan y productos afines en el país.
Francisco Pollock, su propietario, un boricua que echó raíces en el país, recordó que la empresa comenzó sus operaciones en octubre de 1979 con 12 trabajadores, tras frustrarse su apertura originalmente a finales de agosto por el paso del huracán David y la tormenta tropical Federico que asolaron al país.
Enclavada en el Ensanche La Fe, del Distrito Nacional, Panificadora Moderna se inició con tres panes: sobaíto, de pasa y cubano, productos que desde el principio calaron en el gusto popular y superaron las expectativas de su propietario, por lo cual tuvieron que trabajar 24 horas al día para satisfacer las necesidades del mercado.
La aceptación de los productos Dolly’s se ha debido, a juicio de Pollock, a dos factores: el buen precio y a la calidad, que ha sido un sello desde su fundación.
Actualmente fabrica y distribuye 26 productos, como panes de sándwich, galletas tradicionales, productos rellenos de mermelada y cereales de diferentes sabores.
Elabora pan y galletitas de noni y de aguacate, así como unos bizcochitos que tienen gran demanda en la población infantil.
En la Panificadora Moderna, que utiliza harina de trigo y de arroz en la elaboración de sus productos, laboran 142 empleados y 32 vendedores. Cuenta con más de 120 vendedores independientes que diariamente adquieren productos frescos en la empresa.
La clave del éxito del negocio se ha debido a tres aspectos: dedicación, llevar al mercado un producto que satisfaga las necesidades de la población y la armonía con los empleados, plantea Pollock orondo de satisfacción.
Otra de las acciones que le ha dado éxito a la empresa es la innovación. Tienen en el mercado dos productos que gozan de buena aceptación: pan y galletitas de noni y de aguacate.
“Nosotros tenemos maquinarias bastante modernas. Una de las cosas que nos ha ayudado a tener éxito es la modernización de los equipos. El que no se moderniza está mal”, dijo.
La empresa realiza labores de responsabilidad social, y por eso, cada año en el mes aniversario, de lunes a viernes, regala a los habitantes del barrio 500 sandwiches con igual cantidad de vasos de chocolate.
Frecuentemente colabora con instituciones sin fines de lucro y cada día llega una carta pidiendo ayuda. La empresa está dispuesta siempre a dar su mano solidaria.