El exdirector técnico de la OISOE, Víctor Matías Encarnación Montero, señalado por el Ministerio Público como uno de los que participó junto a Francisco Pagán y Aquiles Christopher en el entramado de sobornos, desviación de fondos, falsificación y desfalco con el que habrían logrado estafar al Estado dominicano con más de cinco mil millones de pesos, reveló en la audiencia del pasado lunes del Caso Antipulpo que recibió 35 millones de pesos del contratista Fernando Crisóstomo para financiar los candidatos municipales del PLD en la región Sur durante la campaña del 2020.
Encarnación Mateo, otro de los acusados de corrupción que arriba a un “acuerdo voluntario” con el Ministerio Público aceptando su responsabilidad en los hechos que se le imputan, informó al tribunal que actuó cumpliendo instrucciones del titular de la institución, Francisco Pagán , quien durante la campaña le había asignado unos trabajos en la región Sur, donde recibió el monto señalado del contratista. El exfuncionario explicó la forma en que funcionaba la estructura de pagos en la OISOE, y que Pagán era quien los realizaba sin tomar en cuenta el presupuesto de las obras, que además no se correspondía con la realidad.
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Se sabe que no todo lo que se estafó al Estado fue utilizado para financiar a los candidatos del PLD, pero sí fue la excusa perfecta para justificar el saqueo en la OISOE, como también lo fue en el Caso Calamar, en el que varios exfuncionarios del pasado gobierno están acusados de asociación de malhechores, falsificación de documentos públicos, soborno y financiamiento ilícito de campaña a una escala sin precedente que hizo posible que se esfumaran más de 19 mil millones de pesos de los contribuyentes.
¿Cómo deja eso a los partidos de oposición, que entonces estaban en el gobierno, que fueron a la OEA a denunciar la utilización de recursos del Estado “y otros de origen ilícito” para favorecer a los candidatos oficialistas? Sea usted el jurado.